La Unión de Campesinos de Castilla y León recuerda que aún estamos muy lejos del apoyo recibido en el año 2011 en el que se llegaba a 15,5 millones
La Unión de Campesinos recuerda que, aunque es cierto que la contratación de seguros se ha incrementado con respecto al año pasado, motivado en su mayoría por el temor a una sequía similar a la sufrida en el año 2017, los agricultores y ganaderos de Castilla y León siguen pendientes de cobrar las ayudas prometidas por la Consejería y ya solicitadas por los profesionales agrarios para el fomento de la contratación de los seguros agrarios del año 2015 y 2016.
El número de contratación de seguros frente a la sequía se ha podido duplicar ante las incertidumbres que persisten en el horizonte y ante la más que notable falta de ingresos en el año 2017, que ha llevado a muchos agricultores a tener una situación insostenible, pero no se menciona en absoluto, el incremento que se ha producido en el precio para la contratación de los seguros a costa de los profesionales agrarios que este año deberán pagar un 30% más que el año pasado por el mismo tipo de seguro.
Antes de finalizar el año 2017 se prometió a los agricultores y ganaderos de Castilla y León que se harían efectivas las ayudas destinadas a fomentar la contratación de seguros agrarios pendientes de pago, del año 2015 y 2016, pero a fecha de hoy, seguimos pendientes de que nos ingresen el dinero.
Unión de Campesinos de Castilla y León pide que la Consejería de Agricultura y Ganadería recupere el apoyo para la contratación de los seguros agrarios del 2011 al considerar que los seguros agrarios son una herramienta básica del sector para la conservación de las rentas agrarias, pero éstos deben ser coherentes y ajustarse a las explotaciones agrarias, por tanto debemos seguir mejorando tanto los rendimientos como los precios pues las diferencias de contratación entre unas zonas y otras siguen manteniéndose