Apostamos por hacer un frente común con otras CC.AA. para modificar el programa nacional de erradicación de la tuberculosis bovina y avanzar en el desarrollo de una vacuna.
El Consejo Agrario celebrado hoy, 20 de junio, en Castilla y León se ha centrado en dos únicos temas, por un lado el anuncio de ayudas por sequía para nuestra Comunidad y por otro la sanidad animal.
Con respecto a las ayudas tenemos que calificarlas como totalmente insuficientes, poco imaginativas y tardías. Son un mero parche y generan agravios comparativos entre agricultores y entre zonas. Para este anuncio no hacia falta esperar tanto. Queremos ayudas directas para los ATPs de 25.000€ por explotación.
El instrumento financiero propio de la Comunidad Autónoma, efectivamente puede servir para dotar de liquidez a aquellos agricultores y ganaderos con una explotación media, que enfrentarán en septiembre una campaña muy difícil, pero mucho nos tememos que, precisamente para los que más lo necesiten, esos préstamos no llegarán. La exigencia de un seguro agrario, como reiteradamente venimos denunciando, no debería incluirse como requisito, ya que en numerosas zonas de nuestra Comunidad no se suscriben seguros porque no están adaptados ni a las producciones ni a los precios.
La previsión de ayudas directas de 42 millones para complementar las indemnizaciones de Agroseguro en un 27% para los ATPs, es un buen capote pero que sólo cubre a una pequeña parte de agricultores, quedan fuera todas las pólizas que no incluyen sequía, y todos los que no hayan suscrito seguro. No compartimos que las ayudas vayan vinculadas a los seguros, cuando en amplias zonas, éstos no son atractivos. Esto para UCCL es inaceptable. Los ATPs deben recibir ayudas directas que compensen, al menos en una parte, las pérdidas que esta catastrófica campaña agrícola va a traer consigo. O apoyamos a nuestro sector primario, o toda la cadena agroalimentaria va a verse afectada y las consecuencias serán inasumibles. Es tiempo de tomar decisiones políticas valientes que pongan en valor el sector estratégico que somos.
Por lo que se refiere al tema de Sanidad Animal, insistimos en que la propuesta de la Unión de Campesinos de Castilla y León, mantenida desde hace más de 15 años, es que si el programa nacional que se aplica actualmente para la erradicación de tuberculosis bovina, no ha dado los resultados esperados en más de 30 años, habrá que modificarlo.
Para ello, necesitamos que otras CC.AA. se alíen con nosotros para conseguir una modificación del programa nacional, y que el objetivo sea el control de la enfermedad. No pretendemos menoscabar la sanidad de nuestra cabaña ganadera, pretendemos que, tras los avances científicos actuales, se apliquen métodos y procedimientos de análisis de la tuberculosis bovina que impliquen que efectivamente únicamente se maten vacas enfermas.
Nuestra apuesta por la investigación científica debe culminar en el desarrollo de una vacuna, que sería el principal método de erradicación de la enfermedad, y que dados los avances actuales, podría perfectamente desarrollarse si se invirtiera en ello.