Bienvenido a la revista digital de Empresa Agraria
 

Rueda; buscar el equilibrio

Por Lucio Fernández Choya. Viticultor en la D. O. Rueda

Toda economía de libre mercado se rige por la Ley de la oferta y demanda. Cuando la oferta es muy superior a la demanda, los productos o servicios que se ofertan pierden valor. Los viticultores y elaboradores de vino en la D.O. Rueda tenemos que jugar con este escenario.

El desequilibrio entre oferta y demanda de uva, se manifestó con toda su crudeza en la pasada vendimia 2020 y amenaza con reproducirse o agravarse en la vendimia que se aproxima de 2021.

Según datos del propio Consejo Regulador la vendimia 2020 se cerró a fecha 13 de octubre con 117,4 millones de kg. de uva, sumando todas las variedades. A su vez, también el propio Consejo Regulador informa que a fecha 31 de diciembre de 2020 han salido 83,1 millones de contraetiquetas (10,4 % menos respecto al año anterior).

La superficie de todas las variedades acogidas a la D.O. Rueda a fecha de 4 de Febrero de 2021 y según fuentes oficiales del Consejo Regulador es de 20.134,87 hectáreas.

¿Pero cuál es la capacidad productiva real en la D.O. Rueda en una campaña con condiciones climáticas normales? ¿Y la capacidad de venta de vino en un escenario post – Covid?

¿Por qué digo, capacidad real productiva de uva? En la vendimia 2020 se han manejado mecanismos excepcionales que han sacado uva del mercado natural dentro de la D.O. Rueda. Principalmente dos:  Reducción de un 15% del techo productivo permitido y cientos de hectáreas que han ido a vendimia en verde.

A esto tenemos que añadir las mermas por oídio y la salida de uva producida en la D.O. Rueda hacia otras zonas, principalmente a Castilla la Mancha y Galicia, difícil de cuantificar.

¿Estas válvulas de escape, que permiten sacar kilos de uva del mercado, se van a mantener en la vendimia 2021?

A día de hoy tenemos encima de la mesa el Real Decreto 283/2021 de 20 de abril, para aplicar las medidas del programa de apoyo 2019 -2023 al sector vitivinícola español. Tendremos que esperar su puesta en marcha  por parte de la Junta de Castilla y león.

Es de justicia poner en valor, la determinación que tuvo nuestro Consejero de Agricultura, Jesus Julio Carnero para complementar con fondos adicionales de la Consejería y permitir cubrir la mayor parte de las peticiones en 2020.

Con respecto a la bajada del 15 % del techo de producción por hectárea de 10.000 kg. a 8.550 kg., desconocemos si legalmente el Consejo puede repetirlo, aumentarlo o eliminarlo para esta vendimia 2021.

La sanidad vegetal de la viña depende fundamentalmente de la climatología y del manejo por parte del viticultor. Recomendamos encarecidamente, que independientemente del destino que vaya a tener la uva, se cuide y se atiendan los viñedos con el máximo de profesionalidad.

Los mercados fuera de la D.O. seguirán siendo atractivos para aquellos viticultores que tienen más dificultades para colocar su uva en bodegas acogidas a D.O. Rueda. Este es un arma de doble filo. En un primer momento puede parecer que alivian la presión de exceso de oferta de uva, pero inmediatamente se incorporaran al mercado del vino embotellado, compitiendo con nuestros vinos de Denominación.

Este desequilibrio entre oferta y demanda de uva, ha producido un efecto negativo inmediato en el sector productor. En primer lugar, un descenso drástico en el precio de la uva y en segundo lugar, y no menos importante, una pérdida patrimonial para el viticultor (el precio de la hectárea de viñedo en la D.O. Rueda o su renta, ha descendido radicalmente con respecto a 5 años atrás).

El reto para el viticultor en este escenario estará en el coste de oportunidad. Si para algunos viticultores de la D.O. Rueda las viñas no son rentables. ¿Qué pueden hacer?

La Administración no podrá habilitar ayudas para arrancar viñedos, cuando hasta hace cuatro días estaba ofreciendo subvenciones para nuevas plantaciones.

Sacar viñedos de la D.O. Rueda, consiguiendo producciones mucho más altas y entrar en otros mercados, es otra opción.

De todas formas, se me antoja un horizonte oscuro para el viticultor.

Las bodegas tienen otro problema, y este viene por la persistencia de las medidas restrictivas al sector de la hostelería a causa del COVID-19.

Los repuntes de ventas en el canal alimentación y en la venta Online, no compensan las brutales caídas en las ventas del canal HORECA y el freno a las exportaciones. El 2020 no ha sido un buen año para el vino español, ni en litros de vino vendidos, ni en valor.

A esto tenemos que sumar, la menor defensa que tienen los vinos blancos elaborados en la D.O. Rueda, al tener que ser consumidos mayoritariamente en un menor espacio de tiempo.

Que se puede hacer para retornar al equilibrio entre oferta y demanda de uva en la D.O. Rueda. Difícil solución.

La Administración Regional tiene que tomar cartas en el asunto; diagnosticar y cuantificar las causas del problema, sentar en una mesa a todas las partes implicadas, hacer un plan de actuación, ejecutarle y esperar resultados.

Si cada parte, intenta salvar sus muebles egoístamente, la D.O. Rueda puede tener el acta de defunción encima de la mesa.

 

No comments

Sorry, the comment form is closed at this time.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información. ACEPTAR

Aviso de cookies