“La gente se extraña cuando me ve subida en un tractor, ¿y por qué no?
Sus inicios en el mundo agrícola comienzan con la realización de un curso de empresa agraria, fue ahí, cuando se dio cuenta de “la cantidad de recursos con los que juega la agricultura y que las técnicas en los cultivos no era cosa fácil”.
Animada por seguir otra generación la empresa agraria familiar, sus padres le dieron la oportunidad de aplicar los conocimientos agronómicos adquiridos en una finca agrícola de propiedad de la familia, en la comarca de Benavente y los Valles. Allí, comienza su andadura y su pasión por la agricultura, hasta el punto, de realizar a posteriori, los estudios de Grado en Ingeniería Agrícola y del Medio Rural, con el fin de entender todos los entresijos de esta profesión.
Como agricultora activa, maneja toda la maquinaria agrícola empleada en la finca y realiza cualquiera de las labores agrícolas necesarias en los cultivos que siembra, actualmente, trigo, cebada, guisante, maíz, remolacha, girasol y alfalfa. Estas labores de implantación de los cultivos, va precedida de una planificación anual de la campaña agrícola que realiza para que haya una correcta rotación dentro de cada parcela, y, a la vez, un seguimiento de malas hierbas, plagas, enfermedades y necesidades de abonado, que intenta realizar de forma sostenible.
¿Puedes hablarnos de tu vinculación con Agroteo?
Mi vínculo con Agroteo surge desde el día en que quise sembrar remolacha e hice el contrato con ellos. Con la visita de sus técnicos a la parcela de remolacha, se me asesora sobre el manejo del cultivo durante todo su ciclo, me dan toda la información relacionada con el cultivo y hacen que, con su ayuda, el cultivo de la remolacha me sea mucho más fácil de llevar alcanzando producciones muy por encima de la media. Estoy totalmente agradecida a este colectivo que me da servicio agronómico y administrativo cuando lo necesito, más aún cuando entras en un cultivo que desconoces.
¿Es posible conciliar la vida familiar y personal con la dedicación al campo? ¿Tiene el campo alguna ventaja en este sentido respecto a otras profesiones?
La agricultura como cualquier profesión tiene momentos de mayor carga de trabajo. Viendo la agricultura como empresa agraria, el factor limitante en ella es la maquinaria agrícola y la climatología, estos marcan nuestro ritmo de trabajo y los momentos óptimos para realizar ciertas labores. En la actualidad, hay mucha información climatológica que permite organizarnos y conciliar la vida familiar y personal, si tenemos una maquinaria acorde a nuestra dimensión en cuanto a hectáreas cultivables nos lo facilita.
En esta profesión eres dueño de tu trabajo, te marcas tus responsabilidades y, además, te sirve para aprender de varias profesiones, desde tractorista, electricista, mecánico hasta empresario, ingeniero agrónomo… te genera una riqueza en cuanto a valores humanos. Es muy gratificante estar cuidando cultivos que posteriormente sirven para alimentarnos.
Este es un un sector muy mecanizado y tecnificado donde el conocimiento de la tecnología prevalece sobre la capacidad física para ser un buen profesional
La mujer tiene un papel que jugar en el desarrollo de la agricultura en nuestro país y por supuesto en nuestra Comunidad. ¿Qué mensaje les darías desde su experiencia y cómo las animarías a entrar en el mundo agrario?
En mi comarca la gente se extraña cada vez que me ve subida en un tractor realizando labores agrícolas, ¿y por qué no? La agricultura ya no requiere del esfuerzo físico que mucha gente piensa, en la actualidad, es un sector muy mecanizado y tecnificado donde el conocimiento de la tecnología prevalece sobre la capacidad física de las personas para ser un buen profesional del sector. Además podemos suplirla con “maña”. También indicar que, si hubiera averías, para eso están los profesionales, que lo solucionan en un momento.
La otra parte de la agricultura, la de seguimiento de los cultivos y gestión administrativa de la explotación agrícola, creo que da menos miedo. Por mi parte, animo a todos los que lo estén pensando a que se inicien en esta profesión.
Háblanos brevemente de las ventajas que aporta Agroteo para los remolacheros que están en el colectivo
Agroteo nos da información agronómica y administrativa en todo lo que tiene que ver con la remolacha y su contratación. Realizar la contratación con Agroteo siendo del colectivo tiene muchas ventajas; nos permite tener un descuento en cuanto a la compra de ciertas variedades de semillas, un descuento también en cuanto al seguro agrícola, nos adelanta el 90% del valor de la remolacha al poco de entregar la misma y además esta campaña con la reserva de contratación, decidimos sobre nuestra fecha de arranque en la parcela. Todo ello, sin ninguna cuota o canon por entrega de remolacha. Además, he de añadir que, en el día a día del cultivo, con cualquier duda agronómica, los técnicos se personalizan para detectar el problema y asesorar en la solución, con el objetivo de aumentar rendimientos de forma eficiente en cuanto a costes y medioambientales.
Tras el fin de las cuotas de producción de azúcar de remolacha y ya desde la próxima campaña, los remolacheros podrán crecer en superficie de siembra. ¿Cómo ves el panorama de siembras en tu región? ¿Puedes decirnos si en tu caso tiene previsto ampliar superficie?
Efectivamente la liberalización de las cuotas nos abre a los agricultores y a la comarca, la oportunidad de sembrar más hectáreas con un precio garantizado por el Acuerdo Marco Interprofesional. Esto nos da a los agricultores una estabilidad en cuanto a lo que vamos a cobrar por el cultivo, estabilidad de precio que en otros cultivos es muy volátil. Aun así y siendo la remolacha un cultivo, aunque trabajoso, muy rentable, no aprecio que exista mucha motivación en mi región por aumentar las hectáreas de cultivo. Se piensa mucho en lo trabajoso del cultivo y poco en cómo hacerlo todo algo más sencillo y a la vez más rentable.
En mi caso, no puedo aumentar la superficie, por seguir manteniendo una correcta rotación de cultivo y por mantener mi compromiso con las ayudas agroambientales. Mi superficie de siembra de remolacha seguirá estando en torno a 35 y 45 ha, según la rotación, cumpliendo las 4 hojas en la parcela y sin riesgo de tener problemas de enfermedades.
Estamos estudiando la posibilidad de introducir algún tipo de energía renovable
Una parte importantísima de la rentabilidad del cultivo de la remolacha procede de la gestión de la energía por parte del agricultor. ¿Qué experiencia tienes en tu explotación en este sentido? ¿Qué pedirías a las administraciones públicas?
La disminución de los costes de producción, junto con el aumento en las producciones es clave de éxito para un cultivo en cuanto a rentabilidad y por tanto, competitividad. En la remolacha el riego supone un alto coste y este hay que optimizarlo, optimizar tanto el recurso hídrico como el recurso energético. En cuanto a la energía, en nuestra explotación tenemos la potencia contratada acorde al consumo, minimizado en hora punta, introducimos variadores de frecuencia en los motores, cambiamos las cartas de los pívots para adaptar el riego al uso de aspersores de baja presión, revisamos las pérdidas de carga dentro de las tuberías y en cuanto al agua, regamos según las recomendaciones de riego que nos aporta Azucarera para nuestra parcela.
El riego solar es muy interesante. En nuestra explotación, estamos estudiando la posibilidad de introducir algún tipo de energía renovable. En el momento en que tengamos posibilidad de almacenar la energía, para poder bombear y regar nuestros cultivos directamente en las horas más eficientes de riego, será toda una nueva era de la energía para la agricultura.
Me gustaría que las administraciones públicas apoyaran más estas iniciativas de ahorro energético que llevan consigo altas inversiones.
¿Cuál es el mayor/mayores retos que a tu juicio tienen por delante los remolacheros a nivel agronómico?
El mayor reto que tenemos todos los remolacheros es el de aumentar nuestros rendimientos con una disminución en los costes.
Fuente: Revista Tecnoremolacha
María Ferrero en Castrogonzalo
