AMACYL solicita una reunión con la Junta de Castilla y León y las asociaciones Provacuno e Interovic, para tratar el cese de varios sobrecostes adicionales que deben asumir sin ninguna base
La Asociación de Mataderos de Castilla y León, AMACYL, tras conseguir uno de sus objetivos principales, homogeneizar las tasas que pagan estos centros al nivel de otras comunidades (antes un matadero de Castilla y León pagaba al año unos 8.000 euros más en tasas que los de otras comunidades de nuestro país), quiere abordar otras reformas normativas urgentes para este sector.
Una de ellas es que sea necesario abonar un importe extra para poder tenerlos abiertos a determinadas horas (a partir de las 19.00 horas), fines de semana y/o los días 24 y 31 de diciembre. Esta asociación considera que los mataderos de Castilla y León no tienen que asumir el coste extra que supone tener un veterinario y personal de la Junta en festivos, fines de semana y después de las 19.00 horas. Para AMACYL, estos “pagos extras” los debe asumir la Administración Regional y no estos centros.
A este pago extra, hay que sumar, según la actual legislación en relación con el régimen de las organizaciones interprofesionales agroalimentarias, Provacuno e Interovic, la aportación económica obligatoria y sistema de recaudación que supone un sobrecoste adicional en el desempeño de su actividad. Unas tasas que deben recaudar los mataderos y que se impuso para fomentar la promoción y consumo de carne. Para los mataderos de Castilla y León es injusto que les obliguen hacer de recaudadores. “El sector ganadero pasa por un momento muy delicado por la subida de los costes de producción y al final es un coste que no se repercute casi nunca y asumen los mataderos”, explica Javier Roldán, Presidente de AMACYL.
La Asociación de Mataderos de Castilla y León creen que tras la aparición de los sellos de Tierra de Sabor y la IGP del Lechazo, la labor de promoción se realiza desde estas marcas de calidad reconocida y no es necesario pagar a Provacuno e Interovic, unas tasas por cada animal sacrificado. Un euro en el caso de cada cabeza de vacuno y 0,12 céntimos en el caso del ovino. “Son tasas que suponen un sobrecoste muy importante y que se han quedado obsoletas y sin sentido, con la labor de promoción que ya se hace desde las marcas Tierra de Sabor y la IGP del Lechazo” explica Javier Roldán.
AMACYL, va a solicitar en unos días, una reunión con la directora general de Salud Pública de Castilla y León, Sonia Tamames de la Junta de Castilla y León, de la que dependen los mataderos de esta asociación y las asociaciones Provacuno e Interovic.
