“Elektra es capaz de ofrecer al agricultor todas las novedades tecnológicas aplicadas a la siembra de precisión”
Este año Solá cumple su 50 aniversario ¿Cuéntenos cómo surgió esta empresa que hoy es una referencia en el mercado de la maquinaria agrícola?
A principios de los años 60, el fundador de la empresa, el señor Andrés Solá, siendo muy joven, supo detectar que en el mercado de la maquinaria agrícola había cambios muy importantes que llevarían a una auténtica revolución agrícola. La mecanización en el campo irrumpía con fuerza, lentamente, pero con paso firme.
En casa de los agricultores de Castilla y León siempre ha habido una sembradora o una abonadora Solá. ¿Cómo han evolucionado la cuota de mercado de su empresa desde sus inicios hasta ahora en la actualidad?
Para Andrés Solà Castilla y León fue siempre un mercado muy importante. Una de las zonas agrícolas con más dinamismo y volcadas en la actividad cerealista con grandes extensiones.
Solá es una empresa de fabricación de maquinaria agrícola netamente española. ¿Qué valor añadido tienen los fabricantes nacionales con respecto a los importadores?
Los fabricantes españoles desarrollan sus productos adaptados a unas características específicas que ofrece el sur de Europa. Esta particularidad provoca que el producto español sea robusto y con características que le dan un valor diferencial al resto de fabricantes europeos.
¿Qué valoración nos puede hacer de su red de distribución en Castilla y León?
La red comercial en Castilla y León es una red consolidada de hace muchísimos años. Están implicados en el desarrollo de producto de la empresa, y Solá proporciona una formación constante para tener los mejores profesionales a pie de calle. Tenemos también un Servicio de Asistencia Técnica localizado en Burgos que nos permite atender y resolver con más agilidad cualquier incidente que pueda haber en la provincia de Castilla y León.
Cuando un ingeniero de Solá se pone a diseñar un nuevo modelo tiene en cuenta las opiniones de los agricultores y ganaderos recogidas por el equipo comercial y la distribución. ¿Es uno de los secretos de su éxito, esa escucha activa de las necesidades de los profesionales del campo?
Efectivamente, para desarrollar un producto novedoso y con éxito, lo más importante es conocer la opinión de los agricultores, de ellos emanan las características y particularidades del producto. Clave del éxito en el desarrollo de la maquinaria.
¿Cómo han evolucionado en estos años los equipos de siembra?
De esos incipientes años 60-70 hasta nuestros días, lo más destacable en la evolución es la profesionalización de los agricultores. Hoy los profesionales del campo manejan muchas más hectáreas que anteriormente. La maquinaria que utilizan se ha adaptado a sus nuevas necesidades. Potencia más elevada de los tractores, sembradoras con más autonomía y capaces de sembrar con un solo operario, más variedades y muchas más hectáreas en un solo día.
La digitalización y la agricultura de precisión son el faro que ilumina el camino ahora. ¿Cómo está afrontando Solá el reto digital?
Hace más de 20 años que Solá apostó decididamente por la innovación en la mecanización del campo. Un equipo con más de 10 profesionales ofrecen y enriquecen la Oficina Técnica con la tecnología más vanguardista.
¿Qué novedades nos puede avanzar de cara a la próxima campaña de sementera de cereal 2021 en sembradoras?
Somos pioneros en ofrecer al agricultor las soluciones técnicas más novedosas en el mundo de la siembra. Digitalización y agricultura de precisión son los pilares de la nueva tecnología en el campo.
¿Y con respecto a las Monograno para remolacha, maíz y girasol?
El modelo “Elektra” es la reina capaz de ofrecer al agricultor todas las novedades tecnológicas aplicadas a la siembra de precisión.
El capital humano de las empresas es importantísimo. ¿Qué nos puede decir de la plantilla de Solá?
Este es uno de nuestros puntos más fuertes en la empresa. El capital humano despliega todo su poderío a la hora de conjugar implicación y trabajo en equipo, claves del éxito de Maquinaria Agrícola Solà.
