Resolvemos algunas leyendas sobre esta oleaginosa que se deben tener en cuenta
Todos los años, llegada esta época, muchos agricultores se preguntan si sembrar colza o no. Parece que este año todo anima a sembrar este cultivo, especialmente porque las producciones han sido buenas y porque el precio ha ayudado, sobre todo en algunos casos, que la rentabilidad se ha duplicado respecto a otros cultivos, como el cereal o la cebada. La producción de la colza es muy relativa y en buenas condiciones de nascencia se habla de la misma que se esperaría en esa parcela de cebada.
Pero, ¿cuál es el principal problema de la colza de invierno en la zona de Castilla y León? La nascencia, la implantación del cultivo. A través de este artículo, se analizará algunos mitos que envuelven el cultivo de colza, y que se deben de tener en cuenta.
El primer punto es que el manejo de este cultivo en secano y regadío es distinto: es de los pocos cultivos en los que se recomienda más densidad de planta en secano que en regadío, puesto que se trata de una semilla muy pequeña, cuya siembra es muy superficial, de ahí la perdida de plantas si hay falta de humedad o si ésta no es constante, siendo este último escenario más perjudicial. Este riesgo es más elevado en secano que en regadío, por lo que la recomendación que transmitimos es que se haga una mayor densidad de siembra en las parcelas de secano, ya que en regadío, normalmente, se tiene la posibilidad de realizar un riego de implantación de cultivo, lo cual ayudará a desarrollar una buena nascencia, y que el cultivo se implante correctamente.
Otra de las incógnitas que se plantea con el cultivo de la colza es cuál es el mejor momento de rotación para éste: la mejor rotación sería después del barbecho, aunque se está observando que rotaciones con cereal están funcionando muy bien, algo que está demostrado según estudios de universidades. Después de la colza, la rotación con un cereal, como el trigo, mejora este cultivo, ya que la reestructuración de los suelos, por su tipo de raíces y características, mejora las producciones e incluso las calidades.
No se debe tener miedo a las siembras tempranas si se dan condiciones favorables para el cultivo
Aunque hoy en día todo cultivador de colza maneja algunos parámetros como el PMG o el peso de los 1.000 granos, necesario para regular las sembradoras, se entra en un punto en el que muchos se preguntan si es mejor sembrar con máquinas convencionales, como las de cereal, o con máquinas neumáticas de surco, de 50-55. Como casi todo en el momento de la siembra, se ha de ver con qué se cuenta, lo cual condiciona la acción final: si se dispone de una buena sembradora de cereal se debe optimizar su uso al máximo, aunque se sabe que generalmente se gastará más semilla. Sin embargo, la siembra a 50-55 con sembradoras de línea ahorra gasto de semilla y garantiza una mejor siembra, y, en condiciones normales, una mejor nascencia, ya que la semilla queda mejor colocada en el suelo.
Por otro lado, no se debe tener miedo a las siembras tempranas, como pueden ser a finales de agosto o principios de septiembre, siempre que se produzcan condiciones favorables para el cultivo. Por ejemplo, una tormenta de finales de verano ayudará a la nascencia del cultivo, lo cual hará que el arranque y desarrollo sea favorable; para ello, hay que tenerlo todo preparado para sembrar, o incluso haber sembrado ya, para aprovechar esas condiciones. En el escenario de los regadíos de canales, a veces se produce el corte del canal por la finalización de la campaña de riego en septiembre, y luego no se puede realizar este riego de implantación, lo cual perjudicará al cultivo. Distintos son los riegos de pozo, sin restricciones de agua, pero dependiendo de la lluvia, o los regadíos de canales, es muy positivo y favorable el plantearse una siembra temprana, para aprovechar las mejores circunstancias para la correcta implantación del cultivo y su posterior nascencia.
Respecto a la aplicación de herbicida en la colza, se abre un debate muy extenso sobre cuál es el mejor momento para éste: los herbicidas de pre-emergencia suelen ser más efectivos y económicos, produciendo, además, un mayor beneficio al cultivo por la no competencia de las hierbas desde el inicio; sin embargo, puede ser una acción muy problemática, ya que muchos de los herbicidas de pre-emergencia son residuales para el cultivo de cereal, lo que dificultará la nascencia, y en caso de tener que realizar una re-siembra para poder sembrar un cereal, será perjudicial. Hoy en día, afortunadamente, existen diferentes opciones de herbicidas de post-emergencia, lo cual es mejor para el cultivo de colza, e incluso variedades tolerantes a Imazamox, como cuenta Syngenta Semillas en su portfolio, donde destaca la variedad SY Phoenix CL, un híbrido tolerante a Imazamox con el que conseguirás máximos rendimientos.
Al final, lo más importante es elegir una buena variedad de colza que se adapte a las características de la parcela donde se sembrará, para tener una implantación del cultivo óptima y bien repartida, y tener, por ende, éxito en el cultivo de colza. Para ello, Syngenta Semillas ofrece un catálogo de variedades de colza muy completo, en el cual se puede encontrar el nuevo híbrido para esta próxima campaña, SY Miami, una variedad que se adapta a todo tipo de prácticas agrícolas, con un excelente vigor inicial para una rápida implantación del cultivo, y SY Harnas, una variedad rentable y segura, conocida por sus excelentes resultados en ensayos oficiales. Confíe en Syngenta Semillas en su próxima campaña para asegurar una buena rentabilidad de su cultivo.
Si tiene alguna duda o consulta, pregunte a nuestro equipo técnico de su zona, el cual estará encantado de poder ayudarle en su decisión, o a nuestros distribuidores oficiales.
Autor: Syngenta Semillas Iberia.