Esta organización considera fundamental que la Consejería de Agricultura y Ganadería haga un seguimiento que permita hacer una balance de la situación de los cultivos de Castilla y León, que ante la falta de lluvia, se están secando y empezando a espigar
La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) alerta a la Consejería de Agricultura y Ganadería, mediante el envío de una carta, de la “drástica” situación en la que se encuentran los cultivos de nuestra región ante la falta de agua y reclama la creación de una mesa de seguimiento que permita hacer una primera valoración de los efectos que tendrá la falta de agua en los cultivos de secano y de regadío de nuestra región.
Una gran parte de la superficie de secano se encuentra en un estado “lamentable” ante la ausencia de humedad en el subsuelo, que en caso de no llover esta semana, se perderá toda la siembra. Muchos trigos ya empiezan a espigar, y probablemente ya se den por perdidos. En la provincia de Burgos, Palencia y el Norte de Valladolid ya se observan parcelas que se empiezan a secar.
Por otra parte, los cultivos de regadío también lo van a tener muy difícil, sobre todo debido al bajo nivel existente de agua embalsada, circunstancia que está conllevando que distintas Comunidades de Reganes tengan problema de abastecimiento de agua y muchos agricultores ya han decidido cambiar el maíz por el girasol que requiere menos agua.
La Unión de Campesinos de Castilla y León igualmente reclama a la Administración competente que en los controles sobre condicionalidad de campo sobre el terreno tenga en cuenta esta circunstancia excepcional, ya que, aunque los agricultores lleven a cabo buenas prácticas agrarias, las condiciones climatológicas son fundamentales para que el cultivo se desarrolle de forma adecuada. Tanto es así, que aunque la nascencia ha sido buena prácticamente en toda Castilla y León, los cultivos se empiezan a secar y en caso de que no llueva esta semana los cultivos se perderán.
Igualmente esta organización agraria solicita a agroseguro que tenga en cuenta la situación en la que nos encontramos de sequía extrema para que las tasaciones las hagan de forma adecuada, haciendo un seguimiento del estado de los cultivos.
